domingo, 7 de septiembre de 2008

Duende Armonía



(Apuntes para Teatro Infantil)

No se sabe con exactitud la procedencia del Duende Armonía, unos dicen que bajó de la séptima capa celestial, otros, que es hijo de un Angel, (primera vez que se sabe este asunto de que sean padres solteros), y otros que nació de una Fuente Luminosa, más que trescientas albas reunidas, llamada Amor por Siempre, de donde exhalan perfumes exquisitos en que no cabía una sola tristeza o desazón, posiblemente un lugar como el Paraíso.

Como bien suponen, el Duende Armonía quería y sentía como misión el ayudar a todos, pero era imposible, así es que actuó por “descarte”, lanzando una moneda al aire y decidió:

La familia escogida era aquella en que todos sus integrantes parecían más bien extraños y enemigos. En lugar de atenciones y cariños se prodigaban gestos y palabras que les hacían daño y provocaban un malestar general. No conocían el perdón, preguntaban, para qué sirve eso? No tenían noticia de que el perdón es una llave, que sirve para sacar agua, agua bendita de la nobleza de alma de cada persona y que lava y sana todas las heridas sin dejar cicatrices. Hay heridas más grandes que otras, por cierto, pero cada una necesita una curación y el remedio es el mismo.

Esto es lo que iba a llevar el D. Armo y en grandes cantidades, en sacos si Uds. quieren, para solucionar cosas como:
corazones tristes
caras largas y atribuladas
ojos poco brillantes.

El Duende Armonía sabía que iba a tener arduo trabajo con la Familia que había escogido, creía él, pero en realidad había sido el Duende Mayor o Infinito, el que lo había designado. Como buen Duende no se desalentó en lo más mínimo, le gustaban las cosas difíciles, al contrario, disfrutaba desde antes lo que venía, porque iba a poner a prueba sus poderes, que estaban un tanto oxidados por la falta de uso, debido a que él se quedaba dormido a veces y dejaba que las personas humanas peleasen a su antojo, para darle tema a los periódicos amarillos o rojos que se mantiene con ese tipo de noticias y también para saber hasta donde llegaba la parte malévola, que siempre solía superar lo que su imaginación le contaba.

El Duende Armonía había estado a punto de ser aplastado un día que el Enojón Mayor dio un puñetazo en la mesa y saltó la taza de café hirviendo, en otra ocasión que se tiraban los platos, uno de ellos le pasó rozando su primorosa cabecita, parecida a la de un niño de tres años.

El Duende estaba claro que, en esa casa saltaban vidrios y sillas cuando Doña IRA se instalaba con su inflada figura y su cara roja como el vino, sin llamarla o invocarla. No le costaba nada llegar, y apoderarse de la casa, a medida que alzaban la voz y daban curso al enojo ella se iba inflando de felicidad en base a la infelicidad que veía, mientras se ubicaba en una esquina superior de la habitación, desde allí se alimentaba glotonamente de la negatividad que se lanzaban unos a otros, a mayores insultos, ofensas, decapitaciones verbales, ella recibía un festín de bocadillos gratuitos.

El Duende Mayor e Infinito era el único que podía estar en todos los lugares como “bombero de paz”, y a eso aspiraba el Duende Armo: la ubicuidad, para ayudar a todo el que lo necesitase.

La familia García estaba tranquila esa mañana no sabían porqué y no podían ver a Doña IRA que estaba dormida, colgada en el techo, ellos no lo sabían y tampoco que ésa había sido la causa del insomnio, de esa intranquilidad que les causaba no poder dormir. Razones para estar molestos sobraban, aunque éstas fueran de lo más tontas, pero para la familia García, eran de lo más buenas.

Sólo un pequeño, Rigoberto, pudo ver al Duende camino de la cocina, un día que éste ingresó a la habitación montado en el último rayo de luz de la tarde, que es el más débil y más fuerte al mismo tiempo, el sol termina muy bien su trabajo diario.

Les decía que Rigoberto vio pasar al Duende y creyó que era él mismo porque se le parecía, con su pelo liso y suave y los zapatos chiquitísimos y silenciosos, porque en realidad no pisaba, se deslizaba sobre el suelo.

Rigoberto – le dijo, Duende Armonía, te andaba buscando, es que he leído un cuento que tú eres “arreglador de familias” ¿es verdad?. El Duende desapareció, porque si hablaba ahora recién llegado, perdería su energía y no podría cumplir su misión.

La mamá mientras preparaba los huevos fritos y el pan tostado, gritaba enfurecida:

-Si yo digo que esto es así, es porque lo es y no es de otra manera.
La hija le contestaba:
-Tu estás mal, tienes que pensar de esta otra manera, tienes que pensar como yo.

Los niños peleaban con el papá en el dormitorio por alguna causa televisiva o disputándose el control remoto.

De ahí la conversación subía de tono y las palabras eran cada vez más tristes y desagradables, de seguro la bruja se estaba inflando de felicidad con tanto alimento.
Y seguían:


Hno. : Esta hermana no es mi hermana, no la quiero más, que se vaya.
Hna. : Y si eso dices, yo digo lo mismo, así es que tampoco te quiero.

Aquí fue que el Duende, aunque estaba preparado para este tipo de situaciones, se pudo pálido de dolor al escucharlos y empezó a cobrar un tinte rosado azulino en sus venas y concentrándose como estaba entrenado, proyectó energía maravillosa a una persona de la casa que decía:

-¡Ya, Ya, basta de peleas, esta es una FAMILIA y no un campo de batallas, dejen las batallas para los libros de historia.

A veces, eran los padres los que armaban la guerra hogareña, olvidándose por completo del “buen ejemplo” y se debatían por no decir, nadaban como peces en el agua, como si les gustase y estuvieran de acuerdo en alimentar a la IRA, que sonreía feliz desde una esquina del techo, la muy cobarde para no salir lastimada si la pelea aumentaba, mientras se lo pasaba comiendo, comiendo.

¡Yo tengo la razón!, no, ¡yo la tengo! y así hasta el momento en que el Duende por medio del hijo menor les decía ¡A ver! ¡A ver!, no les da vergüenza, tan grandecitos y no saben solucionar los problemas de comunicación, paren:
1. Escuchar
2. Respetar
3. Olvidar el afán de dominio o de poder.

Los papás se miraron avergonzados y como eran porfiados iban a continuar en lo mismo, pero la fuerza del Duende en esa casa era mayor, además que doña IRA estaba aterrada al ver al Duende allí, porque la última vez le había quitado el “•pituto” y se había desinflado tanto que estuvo al borde de la muerte, por lo menos en esa casa.

Así es que se escabulló como mejor pudo a esconderse al mar y fue como si el sol volviese a brillar en la casa, se desató una gran alegría y una tranquilidad muy grande hacía que sólo existiera comprensión, tolerancia y todas esas cosas lindas que siempre piden los niños para su hogar y que hacen posible ver manos unidas, ojos radiantes y contentos, labios que se abren para prodigar cariño y palabras amables.

El Duende ya confortado de que Rigoberto sabía como actuar en casos de emergencia, montó en el mismo rayo en que llegaba siempre y se alejó y Rigoberto ya no pu+do verlo, pero como se parecía a él, a veces se miraba de cuerpo entero en el espejo y lo saludaba, como si fuese el mismo Duende que tal vez venía de esa Fuente del Amor por Siempre.

El Duende Armonía
Personajes
1. Duende Armonía (no se ve)
2. Irra La Bruja
3. Adrián (niño)
4. Rigoberto (n¡ño que habla con el Duende)
5. Luis (niño)
6. Duende Mayor (no se ve, habla con Duende Armonía)
7. Papá García
8. Mamá García
9. Belén (ha visto al Duende)
10. Ruperto (joven estilo rapero)
11. Nataniel (joven estilo oficinista, con corbata)


ESCENOGRAFÍA
Fondo dibujado con casas(o una sola)
Un patio que consiste en un pequeño jardín con flores, una pileta, un árbol.
Una silla cómoda (ojalá de playa) para la bruja
Tres cajas grandes de colores vivos desde donde aparece el Duende.

VESTUARIO
Los tres niños con vestimenta corriente.
El duende con disfraz de duende: ballerina, gorrito con punta y ponpón, zapatos con punta, color celete pálido, pelo dorado (si es factible o rubio o rojo).

Papá : Con bigote y pelo engominado, con un diario en la mano y zapatillas de descanso.

Mamá : con delantal y ondulines.

Irra : vestido armado con globos que cuelgan, de color rojo: enojo, color negro: negatividad, mal humor.


ESCENA 1
Tres niños (Adrián, Roberto y Luis) están sentados en el patio, en el suelo, juegan a las bolitas.

Adrián : ¿Qué pasaba ayer en tu casa Rigo?
No, nada (avergonzado, baja la cabeza), bueno, si, pero no quiero hablar.

Luis : Ya pús cuenta oh, si en la mía también hay jaleo y jalea Hummh!

Rigoberto : Lo que pasa es que ya no se puede vivir en mi casa... Voy a hablar con el Duende Armonía. ¿Uds. saben de dónde viene?

Adrián : Yo le escuché a mi mamá que llega con el vapor de la tetera.

Luis : ¡Sale para allá!, mira, en mi casa no lavamos las cortinas porque llega cuando están cansadas con tanto polvo ¡ahí parece! (enfático y entusiasmado). Y también cuando no nos cambiamos ropa, por que como es amigo de las lavadoras, así ellas (las lavadoras) descansan un poco, ves? ¡ahí aparece!

Rigoberto : O sea que según tú, el duende es partidario de la mugre ¿no se tratará de otro Duende del que está hablando?
Yo pido el modo de ubicar a ese duende que pone en orden los ánimos, limpia los corazones de óxidos y la casa goza de muuuucha paz.

Entra una niñita, saltando con su muñeca en brazos.

Belén : ¿De qué están hablando?

Rigoberto : De un Duende, quiero entrevistarme con él y no sé donde ubicarlo, tú sabes algo?

Belén : ¡Armonía”, pero si yo acabo de hablar con él. Es que yo tenía el problema que peléabamos mucho con mi hermano y por eso lo llamé.

Rigoberto, Luis,
y Adrián : ¡Cuenta dónde lo viste!!

Belén : El Duende Armonía viene de la Séptima Capa Celeste y es hijo de un Angel y no quiero ser copuchenta, pero de la mamá no se sabe.

Rigoberto : Es que nació de una Fuente Luminosa, así como está pileta, ¡ven? Pero muchíisimo más grande, algo así como cientos de amaneceres reunidos, llamado Amor por Siempre (indica abarcando con los dos brazos).

Luis : Si, yo he visto en el Cable 144 esa Fuente de donde salen vapores que son perfumes exquisitos y no permiten la entrada a la tristeza, es como un Paraíso.

Adrián : Dejen de hablar que va a empezar el programa de TV (El pokemón). Salen.

El Duende
Armonía : (Aparece solo, desde unas cajas instaladas en la esquina del escenario hablar solo).
Es hora de trabajar (se frota las manos)
Como hoy día cocinaron legumbres me es fácil viajar, más el deseo interno de un niño, llego como un rayo ahora (pensativo) ¿a cuál niño ayudo?
Voy a tirar una moneda (la lanza al aire).

Ya está, voy a socorrer primero a la familia de Rigoberto García, llevaré mi maletín que contiene el agua de curaciones (prepara un maletín) (sigue hablando solo) ¡no me queda agua de curaciones! La he gastado toda, hablaré con el Duende Mayor.

El Duende Mayor está cerca de un árbol

Duende Mayor : ¡Cómo! ¡ya se te acabó el agua! Es demasiado pronto, qué mal están estos humanos, se consumen el agua del perdón como Coca Cola.

Duende Armonía : Las heridas son cada vez más grandes y necesitan más agua de curación, Duende Mayor.

Duende Mayor : Lo peor es que yo la genero, la produzco, pero son los humanos los que la llevan en su corazón y si no quieren, hasta ahí no más llegamos.
¡tienen que cooperar! ¡Quieren todo hecho!

Duende Armonía : Cada vez hay más (muestra con su mano)
Corazones tristes, caras largas, ojos poco brillantes. (habla gesticulando).
Por esto debo salir a trabajar de inmediato. Además no quiero oxidarme. La última vez que estuve de vacaciones, las personas peleaban a su soberano antojo.

Duende Mayor : Si, los periódicos hicieron muy buen negocio, se llenaron de noticias sus páginas. Las funerarias tuvieron harto trabajo, lo mismo que el cementerio.

Duende Armonía : En realidad, yo quería ver hasta dónde llegaban sin mi intervención. De seguro que la glotona IRRA estaba de fiesta. ¡Escucha! Siento ruidos (salen para escuchar mejor).

En una mesa está la Familia García que ha llegado para servirse el desayuno.

Papá García : (Da un puñetazo en la mesa). ¡No me gustan los días nublados y, menos cuando anuncian lluvias, este día es una lesera...


Duende Armonía : El Duende Armonía está arriba de una caja
(Nadie lo ve) Uff!! Casi me cae la taza de agua hirviendo por suerte salté a tiempo, aunque pensándolo bien no me pasaría nada, voy a mirar una nube a ver si pasa mi amigo Paperún, duende de la Paz, Perdón y Unión.

Ruperto : Me carga ver tanta loza sucia. Oye vieja, viejuja!! ¡Cómo se te ocurre tener así!, ¡sabís que más te voy a despedir, no servís como mamá!, ¡ya te fuisté!, (empuja a la madre que se resiste) (Saltan objetos varios).

Bruja IRRA : ¡mmmh! se está muy bien aquí, no necesitan llamarme, en cuanto veo venir una pelea, yo me insuflo de felicidad.
AAAhhh!! Si supieran lo bien que me hacen los gritos destemplados, los insultos, las decapitaciones verbales las ofensas más terribles, son bocadillos para mí!! ¡¡petit bouche!!!, además voy a aprovechar de comer yogurth (no la ven que saca uno de la mesa).

Ruperto : ¿Quién sacó mi yogurth? ¡quiero mi yogurth!

Rigoberto : Yo no le sacado, asi es que no tengo nada que ver.

Nataniel : Deja de molestar a Rigo.

Ruperto : Qué te metes tú! ¡Ah!!

Nataniel : ¡Ya no te aguanto más!

(Se produce una gran pelea de la que saltan pastillas que come la gorda Irra (se ponen 3 piñatas colgadas y se hacen saltar por todos lados, incluidos los asistentes). Salen.

Entra el Duende Armonía.

El Duende Armonía trata de reventar los globos a Irra y ella arranca, se sube a las cajas se cae, huye despavorida salen corriendo.

ESCENA 2
Conversan bajo un árbol el D. Mayor y el D. Armonía.

Duende Armonía : Duende Mayor, dame más poder , quiero ayudar a dos familias al mismo tiempo (suplicante)

Duende Mayor : Me temo que estés pidiendo mucho.
Soy el único que puede estar en todas partes. Soy ubicuo. Nadie más puede hacer eso. Así es que ahora “como bombero de paz” cónformate con ayudar a la familia destinada: los García.

Duende Armonia: Está bien, así será, pero ¡¡por favor!! Consígueme ser UBICUO, si tengo que elevar una solicitud (levanta las manos) me avisas.

Duende Mayor : ¡esto sí que está bueno! Ahora me encontró cara de burócrata!!

Duende Armonía : ¿y qué es eso, un insulto?

Duende Mayor : Eso es que tramita a las personas, tra – mi – ta – dor.
Vamos al jardín, allí podremos conversar más ampliamente, (salen abrazados).
Entra Rigoberto (tomándose la cabeza) preocupado por la situación de su familia.

Rigoberto : ¿Qué es eso que pasó hacia la cocina? Soy yo, no, pero si yo estoy aquí!! Se parece a mí, pero con otra vestimenta ¿quién es?

Duende Armonía: Yo soy ¡Armonía!

Rigoberto : ¡Ah mucho gusto, al fin te conozco. He sabido que tú “compones familias” que están descompuestas por la bruja Irra, ¿es verdad? Lo leí en un cuento que está en la Biblioteca de mi colegio.

DuendeArmonía : ¡Ah! Si ese cuento yo se lo dicté al autor para que supieran de mi existencia.

Rigoberto : Es un alivio saber que existe alguien que puede dar “una manito” cuando se está en problemas.

Duende Armonia : Si, pero yo visito una vez, si no lo aprovechan, la familia entonces quedara bajo el poder de la bruja Irra, mi enemiga, a ella le hace pésimo el agua del perdón.

Rigoberto : ¿Qué es el agua del perdón?

D. Armonía : Es como una llave que sirve para sacar agua, agua bendita de la nobleza de cada persona. Con ella se lavan y sanan todas las heridas, sin dejar cicatrices, es decir no queda rastro de rencor. Hay heridas más grandes que otras, pero cada una necesita una curación que existe y ése es el perdón.

Ahora, si me disculpas, tengo que irme, estoy perdiendo energía y tengo que dejarla para las “misiones”. Adiós. (sale el duende detrás las Cajas).

Aparece la familia García en pijamas, adormilados, paseando de un lado a otro, sin ponerse de acuerdo en nada. La mamá García, prepara algo en la mesa, pone el mantel y grita enfurecida.

Mamá García : Si yo digo que esto es así, es porque lo es y no es de otra manera ¡no soporto que me contradigan!

Nataniel : Tu estás mal, tienes que pensar de esta otra manera, tienes que pensar como yo ¡te lo exijo, sino haré un escándalo!

La bruja Irra está contentísima en una esquina bailando y cantando.

En la otra esquina pelean los niños con el Papá García por el Canal de TV y el control remoto alguien lo ha hecho esfumarse. A medida que la pelea va subiendo de tono y las palabras son más desagradables y tristes, la bruja Irra se va inflando de felicidad con tanto alimento (se agregan globos al cuerpo).

Ruperto : Esta hermana no es más mi hermana (saca la lengua) no te quiero.

Nataniel : Eso mismo digo yo, así es que tampoco te quiero. Le tira la oreja y se arma otra pelea.

Duende Armonía : (Por un breve momento se empieza a poner triste) Otra vez, (dice para sí mismo. Se recobra y se concentra, toma su maletín donde tiene agua del perdón).

Rigoberto : ¡Ya! ¡Ya! Basta de camorras, esta es un verdadera familia. Las batallas dejémosla para los libros de Historia.

Papá García : Yo tengo la razón y no vas a venir tú a decirme lo que tengo que pensar y hacer y es más, eres una tonta rematada.

Mamá García : ¡No! ¡No! Eres insoportable, eres un imbécil, te vas a arrepentir (te voy a echar veneno en la comida) (dice hablando para sí misma).

Irra : (no es vista), MMMh!!! Grunch! Grunch!! (come la negatividad que está en el aire), pero al ver al Duende Armonía que ha empezado a derramar agua del perdón, huye despavorida, se le van reventando los globos (el duende los pincha con alfiler).

Rigoberto : ¡a ver! ¡a ver! (el duende le habla algo al oído!
Tan grandecitos y no saben solucionar los problemas de comunicación. PAREN. Acaso no saben que la primera regla para CO – MU – NI – CAR – SE Y EN – TEN - DER – SE es ESCUCHAR.
Pues bien, ahora me escucharían a mí, es una canción que inventé:

ESCUCHAR

Cómo podemos generar
Felicidad en nuestro hogar?
Como podemos llevarnos bien
Te gustaría que cada día
Nuestro alimento fuera mucha alegría
Y llovieran sentimientos
De optimismo y bondad

Escuchar es más que oir
Es entregar nuestro amor
Comunicándonos cada vez mejor

Escuchar es entender
Es comprender que eres distinto a mí
Y por eso esa razón tan sencilla
Nos vamos a pensar igual
Pero eso me va a sacar de mis casillas

Escuchar es ponerme en tu lugar
Es dar mi tolerancia y mi perdón
Lallallalalalalalalalalalalalalalalalla
Cantan juntos al final y salen en ronda


ESCENA 3

Rigoberto y el Duende Armonía están sentados sacando acrósticos de una caja, allí están las letras en grande y las sacan para formar palabras como:

Rigoberto : Revisemos tu cajita Duendy Armo ¿ya?
Duende Armonía: Mi caja tiene las palabras más díficles saquemos una:
F : Felicidad
A : Amistad, Amor
M : Mansedumbre, buenos modales
I : Intimidad
L : Logros
I : Integración
A : Ayuda, Armonía, alegría

En la esquina contraria, está la bruja Irra amarrando a un árbol a tres lindas hadas que no pudieron escapar. Sienten sus gemidos. El duende las reconoce y dice:

D. Armonía : Ellas son Compy, Toly y Respy, no pueden librarse . Seguirán presas mientras los García sigan portándose como salvajes.

Rigoberto : Y esos nombres tan raros:
Duende Armo : Compy es porque ella es la comprensión Toly, la tolerancia, y Respy, el respeto ya, ahora sigamos con mi caja, mira:
R : Ratas
A : Asnos
Z : Zorros
O : Ornitorrincos
N : Nómades

C : Caos
R : Rabias
I : Indignación
S : Sustos
I : Indiferencia
S : Sufrimientos y Salvación

P : Poder
E : Enemigo
L : Locura
E : Enferma
A : Azota
S : Asusta

Rigoberto : Esta es la que da harto problema, ¿no podríamos quemarla?

Duende Armonía : No sacarías nada, porque revive con el poder de la bruja Irra.

Rigoberto : Entonces, hagamos una cosa. Cuando mis papás estén de nuevo en manos de la bruja Irra, te llamo de inmediato ¿de acuerdo?

Duende Armonía : De acuerdo, ahora vámonos (sala con su caja de acrósticos).

Entran los Garcías (papás) a comer algo (hay una mesa con frutas y verduras plásticas).

Papá García : Esta comida está realmente asquerosa!!
¡Cómo puedes cocinar tan mal, acaso crees que somos chanchos! (bota la comida y la pisa).
Mamá García : ¡Monstruo guatón! ¡Monstruo de siete suelas! ¡que te cocinen las hormigas! Yo no te hago más la comida, ni de nana, ni de china ni de cenicienta(se pone coqueta). Me dedicaré a cuidarme las manos (se lima) y el pelo (se arregla) y a salir con mis amigas las gringas criollas, harto tiempo que me están invitando a la “Capilla” el Jueves Femenino que ahora es Masculino (salen los dos discutiendo).

Entra por la esquina contraria el Duende Armo y la Bruja (afligida, agachada, destruida a medias).

Duende Armonía : Ahora si que estás perdiendo todo tu poder IRRA, y no te dejaré ningún globo inflado, te destruiré porque tú enfermas a las personas. ¡Deja en paz a los García!
(La persigue con su maletín para eliminarla con el “agua del perdón”, hasta que ésta cae dentro de una bolsa negra que tiene preparada Rigoberto. La amarran y la sacan del escenario).

Rigoberto : ¡Déjame liberar a las hadas!
¿Quieren que las libere (le habla al público)

Se toman todos de la mano y hacen una ronda para cantar, pero la bruja rompe la bolsa y se pone a cantar.

CANCION DE IRRA.

Yo soy feliz y poderosa
cuando todos pelean y se tiran cosas
Yo engordo con las palabrotas
Con los insultos y puntapiés
Adoro que todo marche al revés.
Soy muy dichosa cuando destierro la bondad.
y la casa queda rodeada
de mi aliento de maldad.
Soy odiosa e insoportable indispensable
para ser infeliz.
No será fácil deshacerse de mí
¡JA – JA – JA!!

Es atrapada nuevamente, por toda la familia García y al fin el Duende Armo puede cantar, ayudado de los demás:



CANCION DEL DUENDE ARMO


Me llaman Duende Armo
Me muevo en atmósferas de amor
Por eso me causa dolor
que se castiguen y que abandonen el amor
La dicha de Armo
es que todos se quieran
que intenten hacerlo rápido ahora
tomarse las manos y jugar como hermanos olvidando la basura que contamina el corazón.
Por eso niños deseen conmigo
Agua del perdón
Agua del perdón.

No quiero que caigan en manos
de la enemiga Irra y sus tentaciones
son muy atractivas sus insinuaciones.

y cuando vengan malas emociones
los dejará solos y atrapados
y se sentirán desolados.

Y por eso niños, deseen conmigo
Agua del perdón
Agua del perdón
Como podemos llevar
felicidad a nuestro hogar.
Como tratarnos siempre bien
Te gustaría que cada día
nuestro alimento fuera alegría
y llovieron sentimientos
de optimismo y bondad.

Escuchar es más que oír
Entregando nuestro amor
Comunicándonos cada vez mejor.

Escuchar es comprender
que eres distinto a mí
y por esa razón tan sencilla
no vamos a pensar igual
pero eso no me va a sacar de mis casillas


Escuchar es ponerme en tu lugar
Es dar mi tolerancia y mi perdón
.

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